Funcionarios de Cultura realizan un arduo trabajo de restauración del ataúd del General Díaz

16-01-2017

Incansable trabajo realizan funcionarios de la Dirección de Registro, Catalogación y Restauración de la Secretaría Nacional de Cultura (SNC), que llevan adelante la puesta en valor del ataúd del Gral. José Eduvigis Díaz.

Este valioso objeto patrimonial e histórico es restaurado actualmente por el equipo de restauración de la SNC para la conmemoración impulsada por la Comisión del Sesquicentenario de la Epopeya Nacional, a 150 años del conflicto bélico más grande que vivió nuestro país (1865-1870).

En este féretro de madera tallada fueron trasladados los restos de uno de los héroes de la patria más destacados de la nación, Gral. José Eduvigis Díaz, fallecido el 7 de febrero de 1867, hasta el Cementerio de la Recoleta.

El proceso de restauración llevará varios meses de ardua labor de los profesionales especializados en la rama. El equipo está integrado por María Zeneida Recalde, Carolina Garceter y Antonia Cuevas, bajo la responsabilidad de la Arq. Mirta Ibarra. Si bien, el 7 de febrero de 2017 se realizarán los actos conmemorativos del fallecimiento del héroe de la patria, el trabajo proseguirá por algunos meses más.

Haciendo un poco de historia, la directora de Proyectos y Obras de la SNC, Arq. Natalia Antola, explicó que la idea que tenía el Mariscal Francisco Solano López, para con el ataúd, era rendir un homenaje a su compañero de guerra.  Para eso, se elaboró una escultura con su rostro y torso, para que la imagen del General pueda contemplarse a lo largo de la historia.

Los restos del General Díaz fueron exhumados en 1939. “Fue entonces cuando se pudo constatar que dentro del ataúd existía un pequeño cofre, en donde se encontraba la pierna apuntada del héroe nacional. Hoy en día, sus restos descansan en el mismo lugar, pero en un nicho de menor dimensión, sitio en el que aún existe un Mausoleo que lleva su nombre. Fue ahí donde lo ubicaron en un ataúd más sencillo para su morada eterna”, relató.

El féretro formó parte del acervo del Museo Nacional de Bellas Artes, donde se acompañaba con la exhibición de fotografías de la época. Su último paradero fue el campamento Cerro León, donde estuvo bajo el cuidado de la Secretaría Nacional de Cultura. En la actualidad forma parte del Museo Campamento Cerro León, dependiente de la SNC, en la ciudad de Pirayú.

En el onomástico de sus 150 años de fallecimiento, que se celebrará el 7 de febrero próximo, la Comisión Sesquicentenaria de la Epopeya Nacional organiza un acto en donde el féretro será llevado en andas, desde la estación de ferrocarril hasta la Iglesia de Pirayú.

 

Antola adelantó que a los efectos de salvaguardar el ataúd, para los actos conmemorativos, se prevé crear una capa de metal que servirá como soporte para protegerlo y prevenir cualquier tipo de daño que pudiera tener.

 

Igualmente, anticipó que luego del 7 de febrero próximo proseguirán los trabajos de mantenimiento, ya que durará más tiempo restaurar el féretro, debido a que se harán los acabados que afinen la solidez de la misma, a los efectos de que la reliquia pueda mantenerse por muchos años más.